miércoles, 30 de enero de 2013

Podría ser otro modo de huir.

Podría coger mil trenes para huir de tu lado,
pero sé que si algún día sacamos un billete juntos será de un TANGO.

Te adapto las letras que quiera(s) para bailar la música de tus dedos en mi rodilla. Que la luna nos ilumine reflejando el brillo de tu sonrisa a través del cristal, dejemos al Sol descansar y que mañana sea él quien me señale que es de día cuando pierda los faros de tus ojos

porque me estás besando la espalda.

miércoles, 23 de enero de 2013

Arded.

No me dejéis pensar en fuego. Sacad el naranja de mi cabeza y el azul, y los suspiros que lo avivan en forma de huracanes.

Hacedme olvidar el agua hirviendo como sudor sobre la piel, y el crepitar de una espalda estirándose. O de alguien mordiendo.

Distraedme de las pequeñas llamas que se reproducen como caricias y son tan devastadoras cuando queman el corazón del bosque.

Prohibidme prestar atención al rojo de unas mejillas, o de unos labios. Al brillo febril de unos ojos.

    Que no quiero recordar que no somos lenguas de fuego carbonizando tus sábanas.

jueves, 17 de enero de 2013

Madrid estaría preciosa si la vistes con tu presencia.


Te regalo Madrid si vienes a verla,
porque tu presencia le daría ese
color blanco al invierno
y no este gris más propio de la ceniza
de tus cigarros. 

viernes, 11 de enero de 2013

Esto tienen que ser las hormonas.

Para que os hagáis una idea,

hubiera dado la vida entera por que ella le mirara como miraba a las manzanas antes de darles el cuarto mordisco, con la desgana de quien se siente dueño y a la vez sabe que no puede no desear

comérsela.

jueves, 3 de enero de 2013

"Hay millones que lo hacen mejor que yo. Pero solo yo lo hago para ti."

    Podría ser una declaración de amor. O la frase con la que terminas un pastel.

    No me hagáis mucho caso, los domingos que caen en otro día nunca me han gustado demasiado. Ni las excusas. Ni descubrir que puedo seguir intentándolo todo pero no soy demasiado buena en nada.

    Así que esa frase es un consuelo más. Un quiero, no puedo pero me gustaría que lo apreciaras.

    Una llamada de atención a mí misma.




Here's looking at me, kid.

martes, 1 de enero de 2013

Vamos.

Me estáis sonando a año nuevo, vida nueva y ningún fallo más. Y mirad, no. Hay un límite entre el optimismo y el fanatismo difícil de reconocer, pero los pesimistas tampoco son realistas. Puedo hablar de cosas de este año 2012, o del 2013 o de cosas sin fecha y aún no sé si son malas o buenas, aunque me ría o llore.

    (De histeria o de emoción)


MADRID SIGUE SIENDO BONITO SIN TI.

    Qué digo bonito, precioso.
    Cómo me gusta buscar sonrisas de las verdaderas en gente lejana, como si no hubiera colocado un cartel en el corazón de "prohibido el paso a toda persona ajena a la obra" después del último destrozo. Como si se me olvidara que los proyectiles pueden deshacerme y ríete tú del fin del mundo, y en ese momento descubro que eres catapulta.

    Desde lejos y tirando piedras como castillos.

    Verás, soy demasiado pequeña para mantener todas las cosas bonitas que (te) pienso. O demasiado mayor. O demasiado idiota. Y quizás un poco triste.

    Pero no importa porque la determinación tiene forma de bichitos y ahora son termitas que se están comiendo tu madera, catapulta.

    Soy un cohete emocional.

    Y me estoy deshaciendo de partes que dejan de tener sentido en mi viaje.

    Solo espero no necesitarte cuando me rompa. Lo desearía si fuera una estrella fugaz, pero los deseos a cohetes no funcionan.



PERDER LAS ALAS. Y LA TIERRA.

    Que no nos olvidamos. Eres mi Haiti personal, solo que no podemos reconstruirte.

    Pero no pasa nada porque no querrías. Seguimos adelante y la abuela de los monstruos marinos puede seguir recitándonos con caricias lo que tú decías con palabras.

    Soy una rama que parece frágil de un árbol mucho mayor pero puedo soportar este peso. Y los que vayan llegando.



-NO TE PREOCUPES, AHORA SOLO PUEDE MEJORAR.
-CLARO QUE PUEDE EMPEORAR. PREFIERO PENSAR ASÍ Y LUEGO ALEGRARME QUE PASAR OTRA DESILUSIÓN.

    Pues yo no. Ya no. Estoy muy cansada de todo eso. Quiero castigar a la vida cuando se porta mal, pero dudo que el rincón de pensar le sirva de algo. Ni intentar abofetearla.

    No se pueden controlar las mareas.

    Y sin embargo a veces necesitamos negarla a gritos tanto como la necesitamos. A secas.

    Pero ya, mejorará, y todo sigue y "panta rei" y me rompéis el alma cuando sois pesimistas. No puedo ser feliz por vosotros.

   Y tampoco queréis, si no sonreiríais vosotros.

    He descubierto que soy más optimista de lo que pensaba. Que aunque no puedo mantener la sonrío cuando toco fondo, puedo intentarlo al llorar.

    Lo he conseguido un par de veces. Y que eso no impide que te destroces por dentro, lo sé.



He perdido la fe tantas veces este año que no (os) voy a seguir contando.

Pero tarde o temprano se encuentra.

Feliz año, aunque todo esto sea un juego y ni acaba ni empieza.

Ánimo.