Eres bonita y picas,
como la Primavera.
Tu piel florece, y si replicas,
se esconde la vida entera
bajo tus pies.
Tu pelo empuja el polen hacia mí,
el viento lleva tu olor a las abejas.
Tus labios son fresas, con ají,
si gritas derrumbas todas las tejas,
de la ciudad.
Yo hoy solo venía a decir
que los pétalos palidecen ante tus pecas.
El girasol tiene motivos para vivir
cuando conviertes en grecas
sombras chinescas.
Y créeme,
la hierba crece sana solo para abrazar tus tobillos.
Ójala fuéramos un ovillo,
de sentimientos y sol.